El perfeccionismo puede ayudarte a entregar un trabajo excelente, pero también puede aumentar tu ansiedad y disminuir tu productividad.
En esta época de incertidumbre, conviene estar en modo BETA para ciertos trabajos y tener mucho cuidado que el perfeccionismo no se interponga en tu camino. A fin de asegurar que tus metas se cumplan sin que el perfeccionismo te perjudique, te recomiendo estos 3 tips:
1ro. Conoce cuándo es el momento de dejar un proyecto cómo está!!!, entregarlo y seguir adelante. Una forma de hacerlo es crear un check list de los elementos esenciales de una tarea. Por ejemplo, si estás trabajando en una presentación, asegúrate de que la presentación aborde las principales preocupaciones y detalles del por que ocurren estas situaciones.
2do. Tu perfeccionista interno o “tu yo interno” podría preocuparse por la elección y cada punto y coma de tu proyecto, pero una vez que tu “check list” con los principales temas esté completo, respira y reconoce que tienes todos los elementos bajo control.
3ro. Otra táctica es pedirle a un colega de confianza que te ayude a obtener una perspectiva distinta, que te recuerde tener en mente el “big Picture”, y no perderte en las ramas. Así como que los altos estándares son excelentes, pero no deben impedir realizar tu trabajo oportunamente, que agregue valor a tu cliente y oriente en la toma de decisiones.
Yorumlar