Un artículo que apareció en el periódico Houston Press decía que el 80 por ciento de futbolistas retirados de la NFL acaban en destitución financiera y emocional antes de dos años de jubilarse.
Un jugador, Ted Johnson, de los Patriotas, lo dijo de esta manera: “Es difícil explicar, pero uno se retira del juego, y hay algo así como un nivel de vergüenza al tratar de aclimatarse a la vida cotidiana. Se siente como si uno ya no tuviera un propósito.”
La Dra. Jean Twenge, psicóloga social de la Universidad Estatal en San Diego, escribió un libro titulado La generación yo: Por qué los estadounidenses jóvenes de hoy se sienten más confiados, firmes, con derechos, y más desdichados que nunca antes. Ella dice: “La investigación nos dice que la vida moderna no es buena para la salud mental. . . .
Hay evidencia clara de que el enfoque en el dinero, la fama y la imagen ha crecido. También hay clara evidencia de que las personas que se enfocan en el dinero, fama e imagen con mayor probabilidad se sentirán deprimidas y serán víctimas de la ansiedad.”
Cuando nos envolvemos demasiado en nosotros mismos y en las cosas del mundo, estamos edificando nuestras vidas en cosas que se desvanecen.
Hay ciertas cosas en la vida que generalmente se consideran como sin sentido o no dignas de enorgullecerse. Estas pueden incluir:
1. Materialismo excesivo: Centrarse en la acumulación de bienes materiales y perseguir el dinero y el consumo desmedido sin considerar el impacto en los demás o en el medio ambiente.
2. Egoísmo y falta de empatía: Ignorar las necesidades y sentimientos de los demás, actuar de manera egoísta y no mostrar compasión o empatía hacia los demás.
3. Envidia y comparación constante: Sentirse constantemente insatisfecho y envidiar lo que otros tienen en lugar de valorar y apreciar lo que uno mismo tiene.
4. Negatividad y pesimismo: Adoptar una actitud negativa y pesimista ante la vida, enfocándose en lo que está mal en lugar de buscar soluciones y oportunidades.
5. Falta de autenticidad: Vivir una vida que no refleja quién eres realmente, fingir ser alguien que no eres para complacer a los demás o encajar en ciertos estándares sociales.
6. Crueldad y falta de compasión: Lastimar a otros deliberadamente, ser insensible ante el sufrimiento de los demás o no mostrar compasión hacia los seres vivos.
7. Ausencia de crecimiento personal: Resistirse al crecimiento personal y al aprendizaje, negarse a salir de la zona de confort y no buscar oportunidades de desarrollo y mejora.
Estas son solo algunas de las actitudes y comportamientos que se consideran sin sentido o poco valiosos en la vida.
Cada persona puede tener su propia perspectiva y valores, por lo que es importante reflexionar sobre lo que es significativo para ti y buscar vivir de acuerdo con tus propios principios.
Las cosas que valen en la vida pueden variar de una persona a otra, pero en general se considera que lo siguiente tiene un valor importante:
1. Salud: La salud es fundamental para disfrutar de una vida plena y feliz. Valorar y cuidar tu bienestar físico y mental es esencial.
2. Amor y relaciones: Las relaciones significativas con familiares, amigos y seres queridos son fundamentales para nuestra felicidad y bienestar emocional.
3. Propósito y pasión: Encontrar un propósito en la vida y perseguir nuestras pasiones nos da un sentido de dirección y satisfacción personal.
4. Crecimiento personal: El crecimiento personal y el aprendizaje continuo nos permiten desarrollarnos como individuos, adquirir nuevas habilidades y expandir nuestros horizontes.
5. Experiencias y momentos: Valorar las experiencias y los momentos especiales en la vida, como viajes, aventuras y momentos de alegría, nos enriquece y nos brinda recuerdos duraderos.
6. Contribución y servicio: Sentirnos útiles y hacer una diferencia positiva en la vida de los demás es gratificante y nos ayuda a desarrollar un sentido de comunidad y conexión.
7. Autenticidad y autodescubrimiento: Valorar y ser fiel a uno mismo, permitiéndonos explorar y descubrir quiénes somos realmente, nos ayuda a vivir una vida auténtica y significativa.
Recuerda que cada persona puede tener sus propias prioridades y valores, por lo que es importante reflexionar sobre lo que es importante para ti y buscar tu propia definición de lo que vale en la vida.
Encontrar y retomar el propósito en la vida puede ser un proceso personal y único para cada individuo. Aquí hay algunas sugerencias que podrían ayudarte:
1. Reflexiona sobre tus valores y pasiones: Tómate un tiempo para reflexionar sobre lo que realmente te importa en la vida y lo que te apasiona. Considera cuáles son tus valores fundamentales y cómo puedes vivir de acuerdo con ellos.
2. Establece metas significativas: Define metas que estén alineadas con tus valores y que te inspiren. Estas metas pueden ser grandes o pequeñas, pero es importante que te motiven y te den un sentido de propósito.
3. Encuentra tu pasión: Identifica las actividades o áreas de interés que te apasionen y busca maneras de integrarlas en tu vida diaria. Ya sea a través del trabajo, hobbies o voluntariado, encontrar tu pasión puede darte un sentido renovado de propósito.
4. Conéctate con los demás: Cultiva relaciones significativas y apoya a los demás. Participa en actividades comunitarias, únete a grupos de interés o busca oportunidades de voluntariado. El servicio a los demás puede brindarte una sensación de propósito y significado.
5. Practica la gratitud: Agradece por las cosas positivas en tu vida y enfócate en lo que tienes en lugar de lo que te falta. La gratitud puede ayudarte a encontrar significado en las pequeñas cosas y a apreciar lo que ya tienes.
6. Aprende y crece: Busca oportunidades de aprendizaje y crecimiento personal. Ya sea a través de la educación formal, la lectura de libros, la asistencia a conferencias o la participación en cursos en línea, el aprendizaje continuo puede ayudarte a expandir tu perspectiva y encontrar nuevos propósitos en la vida.
7. Encuentra equilibrio: Asegúrate de equilibrar tus responsabilidades y obligaciones con actividades que te traigan alegría y satisfacción. El equilibrio entre el trabajo, el tiempo para ti mismo, las relaciones y las actividades que te apasionan puede ayudarte a encontrar un propósito más equilibrado en la vida.
Considera que retomar el propósito es un proceso continuo. Puede llevar tiempo y experimentación, pero estar abierto a nuevas experiencias y perspectivas puede ayudarte a redescubrir un sentido renovado de propósito en la vida.
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