Un hombre inesperadamente pierde a su esposa, y en su angustia llama al celular de ella simplemente para oír el sonido de su voz.
Una joven pierde a su novio y se niega a borrar su último correo de voz de él; su único enlace con el amor perdido. Es un método bien conocido que se usa en las películas para ilustrar el dolor de la pérdida; la negativa a borrar la voz de un ser querido de la contestadora o del correo de voz.
No debería ser sorpresa que las palabras son tan poderosas. Las palabras escritas son poderosas, pero nada toca como el sonido de la voz humana; especialmente la voz de un ser querido. Pero las palabras son una espada de dos filos, especialmente Cuando no se dicen con cuidado en el centro de trabajo, en donde las personas se conocen tan bien el uno al otro. Las palabras pueden herir y las palabras pueden curar. Cuando la verdad se dice, hay que decirla con amor.
Decídete en tu corazón a usar tus palabras para animar y bendecir; son música atesorada para el alma. Para ello comunicate asertivamente.
La comunicación asertiva es un estilo de comunicación en el que una persona expresa sus pensamientos, sentimientos y necesidades de manera clara, directa y respetuosa, sin agredir ni someterse a los demás. Es una forma de comunicación equilibrada que busca establecer límites adecuados y fomentar el respeto mutuo.
La comunicación asertiva implica ser capaz de expresar opiniones y deseos de manera firme pero amable, sin violar los derechos de los demás. También implica ser capaz de escuchar activamente y respetar las opiniones de los demás.
Algunas características de la comunicación asertiva incluyen:
- Expresar opiniones y sentimientos de manera clara y directa.
- Ser capaz de decir "no" cuando sea necesario, sin sentirse culpable.
- Respetar los derechos y opiniones de los demás.
- Ser capaz de pedir lo que se necesita y negociar soluciones.
- Mantener un tono de voz tranquilo y controlado.
- Utilizar lenguaje corporal abierto y no amenazante.
La comunicación asertiva es importante en las relaciones personales y profesionales, ya que promueve una comunicación efectiva, resuelve conflictos de manera saludable y establece relaciones basadas en el respeto mutuo. Practicar la comunicación asertiva puede mejorar la autoestima y la confianza en uno mismo.
No obstante, el riesgo de una comunicación coercitiva radica en el uso de tácticas de manipulación o presión para influir en la otra persona sin su consentimiento o voluntad. Esta forma de comunicación puede generar una serie de consecuencias negativas, como:
1. Daño emocional: La comunicación coercitiva puede afectar negativamente la autoestima y confianza de la persona receptora, generando sentimientos de ansiedad, miedo o inferioridad.
2. Deterioro de relaciones: El uso de tácticas coercitivas puede dañar las relaciones interpersonales, ya que no se basan en el respeto mutuo y la voluntad de ambas partes. Esto puede llevar a distanciamiento, conflictos y rupturas.
3. Falta de autenticidad: La comunicación coercitiva no permite que las personas expresen sus pensamientos, sentimientos y opiniones de manera libre y auténtica. Esto puede generar frustración y resentimiento, ya que se ven obligadas a actuar en contra de su voluntad.
4. Pérdida de confianza: La coerción en la comunicación puede socavar la confianza en los demás, ya que se percibe como una violación de los límites y la integridad personal. Esto puede dificultar la construcción de relaciones sólidas y saludables.
Es importante fomentar una comunicación basada en el respeto, la apertura y la voluntad mutua, donde se promueva el diálogo sincero y se evite el uso de tácticas coercitivas.
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